Y una última mención especial: Recordamos a las refugiadas
No queremos que caigan en el olvido tampoco las mujeres y niñas que viajan a Europa, quienes
huyendo de una guerra se meten en otra. La guerra que les “ofrecemos” aquí en nuestros
países, es una guerra opaca, ¡hipócrita! No se trata de una guerra con armas, ¡No! Nuestra
guerra es mucho más perversa. Tanto que para salvar sus vida s las tienen que arriesgar. En
ese viaje si no mueren ahogadas, de frío, o de hambre, muchas caen en manos de grupos
criminales de tráfico de personas con fines de explotación sexual o laboral. Además las
agresiones sexuales en el camino están a la orden del día. La gran mayoría de las personas que
se dirigen a Europa son hombres, lo que deja a las mujeres en situación de especial
vulnerabilidad. En los campamentos, muchas prefieren no comer para evitar tener que ir al baño
y compartir lugares de aseo. Y no queremos olvidar a esas 10.000 criaturas “refugiadas“ no
acompañadas, perdidas. ¿Refugiadas? ¿Acaso les ofrecemos refugio? 10.000 niños y niñas
desaparecidas -- No más ¡olvidadas y olvidados!
Por todo ello, este gobierno se compromete a trabajar por la justicia de género y en especial por:
• Conseguir un pacto de estado para frenar la violencia machista. Estas políticas deben contar con
partidas presupuestarias suficientes, políticas de sensibilización ciudadana, de garantía habitacional y
de acompañamiento permanente a las víctimas.
• No aplicar recorte presupuestario alguno a las políticas de lucha contra la violencia machista e
incrementar el presupuesto destinado a la igualdad de género.
• Promocionar programas de relocalización rápida de las personas refugiadas.
• Implementar la Llei 17/2015 per a la Igualtat Efectiva de Dones i Homes en todas las obligaciones destinadas a los gobiernos locales.
• Garantizar que las contrataciones locales incluyan cláusulas de igualdad de género (análisis de impacto de género, obligatoriedad de planes de igualdad, protocolos contra el acoso sexual y por
razón de sexo, medidas contra la brecha salarial de género...) y hacer un seguimiento de su
aplicación.
• Incluir criterios de género en las subvenciones de los ayuntamientos, en los planes de formación y en
las bolsas de trabajo.
• Elaborar (en caso de que no lo tenga y, si lo tiene, reforzar) el plan de igualdad interno para el
personal de los ayuntamientos, asegurando la igualdad en el acceso y mantenimiento de los puestos
de trabajo, la paridad en la toma de decisiones y la reducción de la brecha salarial de género.
• Elaborar (en caso de que no lo tenga y, si lo tiene, reforzar) un protocolo contra el acoso sexual y por
razón de sexo en los ayuntamientos.
• Trabajar por incluir la perspectiva de género en todas las políticas que realizan los ayuntamientos,
realizando informes de impacto de género de toda la nueva normativa.
• Formar al personal técnico y político en materia de igualdad de género.
• Educar y garantizar el uso de un lenguaje inclusivo en las comunicaciones internas y externas de los
ayuntamientos, excluyendo imágenes o lenguaje sexista.