Desde el Área d'Igualtat de PODEM El Vendrell nos unimos al dolor de este fatídico suceso, nadie más debería perder su vida a causa del daño (físico y/o psicológico) infringido por una sociedad que no entiende la LIBERTAD DEL SER HUMANO en toda su amplitud de palabra y significado (en los centros educativos, en los centros de salud, en las administraciones del estado y en los entes que dependan directa o indirectamente de estas, etc).
Una sociedad CIVILIZADA no debe permitir que haya "personas" que puedan atormentar impunemente la vida de un adolescente por cuestiones de LIBERTAD SEXUAL hasta el punto de inducirlo al suicidio. Es un delito y la sociedad que lo permite es cómplice de dicho delito.
La educación sexual, ética y cívica son pilares fundamentales para que estos casos no se repitan, pero tanto o más importantes son los valores adquiridos en el núcleo familiar. Para ello las familias deben de involucrarse en la educación a sus hijos con valores morales, de respeto y éticos.
Todos somos iguales, en nuestra diversidad sexual. Todos somos personas y todos tenemos derecho a vivir nuestra vida sexual sin hacer daño a nadie por ello... RESPETO, VIVE Y DEJA VIVIR.
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